Foto: Carlos Alonzo
La Sala emitió un amparo provisional a favor de los diputados Flores, Blanco y Chic, ordenando a la Junta Directiva del Congreso respetar sus derechos como integrantes del bloque VOS.
Este amparo establece que la directiva debe garantizar que los diputados conserven su estatus dentro del bloque, incluyendo sus posiciones como jefe y subjefe de bloque.
Además, prohíbe considerar las cartas presentadas por el secretario general del partido, Carlos Bezares, fechadas el 20 y 21 de enero de 2025, al carecer de respaldo legal por parte del Comité Ejecutivo Nacional.
A pesar de esta resolución, los diputados aseguran que la Junta Directiva ha ignorado el amparo y ha procedido a declararlos como diputados independientes.
“Hemos sido amparados y Junta Directiva está pasándose este amparo por el arco del triunfo y eso no lo podemos permitir, porque entonces estamos en un estado de dictadura, estamos en un estado donde no se acatan las leyes”, dijo. Hoy, la página oficial del Congreso, cambió el estatus de los diputados a independientes.
Blanco afirmó que “de los 17 miembros del Comité Ejecutivo, 14 rechazaron estas acciones, lo que evidencia que Bezares actuó por cuenta propia”. Además, acusaron al secretario de usurpación de funciones y de intentar interferir con el Congreso mediante acciones ilegales.
Flores también agregó que el conflicto refleja una persecución política en su contra, ya que han sido la “única oposición real, fiscalizando irregularidades como el incremento salarial de los diputados y el mal manejo del presupuesto nacional”.
Los diputados anunciaron que recurrirán a instancias judiciales para que se respete el amparo provisional que protege sus derechos como miembros de la bancada VOS. Aseguraron que continuarán con su labor de oposición y fiscalización, a pesar de los intentos de silenciarlos. “No vamos a callarnos frente a las injusticias que afectan al pueblo guatemalteco”, señaló Flores.
Esto ocurre en medio de tensiones en el partido político que llegaron a un punto más álgido ayer entre gritos y discusiones, así como agresiones por parte de Aldo Dávila a una trabajadora del Congreso.