El 1 de agosto de este año, por medio de la circular número 019-2024, firmada por Mazariegos, se instruyó a decanos, directores de escuelas no facultativas, directores de centros universitarios e institutos. Así como a directores generales, coordinadores, jefes, subjefes de unidades ejecutoras y administrativas; y al resto de personal que labora en la universidad sobre las nuevas medidas para ingresar a la Rectoría. 

“Las dependencias que se encuentren laborando en el Edificio de Rectoría deberán continuar con la recepción y remisión de correspondencia a través de los correos oficiales; ya que el ingreso al Edificio de Rectoría es únicamente para el personal contratado y visitas oficiales que sean autorizadas por los jefes de diferentes Unidades Administrativas que laboran dentro del edificio, no para el público en general”, se lee en el documento al que tuvo acceso este medio. 

Las oficinas a las que se restringe la entrada son el Consejo Superior Universitario, Secretaría General, Coordinadora de Información Pública, entre otras. 

“Esto solo ratifica el carácter despótico de quienes usurpan la rectoría de la Usac. Es una catástrofe lo que están haciendo; ya no hay cómo calificar esta nefasta administración. En nuestras manos está impulsar las denuncias que creamos pertinentes en el marco de esta violación, como nuestros derechos como parlamentarios, ni que decir de la violación del derecho a las personas en general de acceder a las instituciones públicas”, dijo Raúl Barrera, diputado electo por Movimiento Semilla. 

“No puede acogerse al régimen de exclusividad y de secretividad una instalación como Rectoría. No es la bóveda del Banco de Guatemala”, agregó el parlamentario. 

El pasado 16 de mayo, los diputados Elena Motta, David Illescas y Barrera, todos electos por Movimiento Semilla, llegaron a Rectoría con dos oficios para requerir información pública, pero el personal de la Universidad se negó a recibirles los documentos. En lugar de atenderlos, los hicieron esperar por dos horas y luego bajó un equipo de la Usac para fotografiarlos y filmarlos con cámaras semiprofesionales y celulares. 

“Por el miedo que tienen de que descubran todas sus ilegalidades emitieron una circular ilegal en la cual está prohibido recibir de manera física y sellar con este sello la información que se le viene a solicitar”, dijo en ese momento Motta en un video donde se grabó lo sucedido y publicado en su red Tik Tok.

Mazariegos es considerado por varios grupos dentro la Usac y de organizaciones de sociedad civil como “usurpador” debido a la manera en la que llegó al cargo en mayo de 2022, cuando las puertas del Parque de la Industria donde se celebraron las elecciones fueron cerradas y no se permitió el ingreso de ningún votante, únicamente para quienes lo elegirían a él. 

La Usac retomó parcialmente las clases presenciales este año y abrió sus puertas luego de tres años de permanecer cerrada, primero por la pandemia y luego por la toma del campus en protesta por la elección de Mazariegos. Desde que llegó al poder, pocas veces se le ha visto en actividades públicas. 

La Rectoría no es el único edificio de la Usac en la que se restringe el acceso; en el edificio de la Dirección General de Administración (Diga) tampoco se puede ingresar fácilmente. En el primer nivel de ese lugar se encuentra el monitoreo que realiza el personal de la seguridad universitaria en donde hay aproximadamente 40 pantallas que transmiten imágenes de todo el campus, incluyendo las dos entradas, una por el Periférico y la otra en Avenida Petapa.