Más de tres horas duró la discusión de los diputados que rechazaron el Acuerdo Gubernativo enviado por el presidente Bernardo Arévalo, para aprobar el Estado de Calamidad. Los votos en contra evidenciaron la falta de negociación con las bancadas de oposición.
Durante la sesión del Congreso de la República de este 11 de abril, los diputados conocieron la primera iniciativa enviada por el presidente Bernardo Arévalo, el Acuerdo Gubernativo 1-2024, sobre un Estado de Calamidad para atender la emergencia de los incendios activos a nivel nacional.
La discusión duró alrededor de 3 horas, y más de 10 diputados intervinieron argumentando por qué votarían en contra y a favor. Desde el principio fue evidente la falta de consensos. Además, la presencia o intervención de los diputados de Semilla fue casi nula.
Una de las principales inconformidades de los diputados fue la consideración de restringir a la ciudadanía algunos derechos fundamentados en el artículo 5 de la Constitución Política de la República de Guatemala (CPRG). Pese a que los diputados del Movimiento Semilla presentaron una moción para retirar esta prohibición, los diputados de otras bancadas no apoyaron el decreto.
En su cuenta de X, el diputado Adim Maldonado explicó que no había votos suficientes para aprobar o improbar el Estado de Calamidad, “estos temas se tiran cuando se tienen los votos. Nosotros apoyamos pero lastimosamente no se tuvieron los votos”, dijo.
El abogado Javier Urizar explica que, restringir estas libertades son una medida “normal” a la hora de decretar un Estado de Excepción. Sin embargo, considera que el presidente Bernardo Arévalo pudo ser más claro con las implicaciones.“Si no se suspende el artículo 5, las disposiciones presidenciales que extienda el presidente serían inconstitucionales”, explicó.
Para Urizar, el mejor ejemplo para entender por qué es necesario limitar los derechos establecidos en el artículo 5, son los Estados de Excepción vigentes durante el 2020 en la pandemia del Covid-19. El expresidente Alejandro Giammattei emitió disposiciones presidenciales en las que limitó la circulación de vehículos, a través de las restricciones descritas en el acuerdo presidencial.
En el artículo 5 de la CPRG habla sobre la libertad de acción, la cual indica que, “toda persona tiene derecho a hacer lo que la ley no prohíbe”. También protege a los guatemaltecos para no ser perseguidos por emitir sus opiniones.
Una alianza que empezó a debilitarse antes de Semana Santa
El 14 de marzo fue la última vez que el Congreso de la República sesionó antes del receso de Semana Santa. Ese día, durante la votación en la elección del representante del Congreso ante la Junta Monetaria, como una táctica legislativa, el diputado Juan Carlos Rivera del bloque Victoria, el cuarto secretario de la Junta Directiva del Congreso, se desmarcó en medio de la votación. Esto rompió el quórum y suspendieron la sesión.
La táctica fue una decisión en apoyo a la alianza oficialista, que no había reunido los votos suficientes para que el diputado Samuel Pérez fuera el representante del Congreso ante la Junta.
eP Investiga publicó un reportaje sobre la debilidad de la alianza oficialista. Diputados como Adim Maldonado de la UNE y Manuel Archila de Cabal, aseguraron que la alianza con Semilla era por temas.
Samuel Pérez de Semilla indicó que el Congreso no tiene aplanadoras y que, aunque reconoce que no han logrado los diálogos necesarios para mantener una alianza, se están tomando decisiones con bases democráticas.
Previo a la Semana Santa, el diputado Maldonado advirtió la importancia de mantener una alianza para aprobar leyes en beneficio del funcionamiento del Ejecutivo, porque hasta ese entonces solo aprobaron leyes sociales y no propuestas desde presidencia. Mantener a la alianza “dependerá del quiebre de cintura política de Samuel y Semilla”, dijo.
El rechazo a esta primera propuesta del Ejecutivo evidencia que el partido oficial no tiene una alianza sólida para alcanzar los votos suficientes.»
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