_{Foto: Edwin Bercián / No-Ficción}

El excandidato presidencial llegó a la Torre de Tribunales el 26 de julio, para comparecer en una audiencia de etapa intermedia por los delitos de lavado de dinero, asociación ilícita y cohecho pasivo, según los señalamientos del Ministerio Público (MP).

La Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI) indica que Baldizón habría recibido fondos de sobornos de Odebrecht para financiar su campaña electoral de 2015, cuando fue presidenciable por el partido Líder.

Durante su llegada a los tribunales, ofreció declaraciones a la prensa, asegurando ser inocente de las acusaciones y mencionando que hay “muchas pruebas” a su favor. Según él, los acuerdos de colaboración de dos brasileños que supuestamente “robaron dinero al pueblo de Guatemala”, están nulos. Además, enfatizó que no fue funcionario público, ministro ni presidente, y que las acusaciones en su contra son un intento para dañarlo políticamente.

En 2019, Baldizón fue juzgado y condenado por la justicia en Estados Unidos por el delito de lavado de dinero. En 2022 fue deportado a Guatemala. 

Sobre el caso

Este caso se deriva de otro: “Construcción y Corrupción». Una investigación que reveló una estructura criminal liderada por Alejandro Jorge Sinibaldi Aparicio, exministro de Comunicaciones. 

Sinibaldi presuntamente gestionaba cobros ilegales a contratistas, exigiendo porcentajes que oscilaban entre el 5% y el 15% a cambio de realizar desembolsos. Entre las entidades involucradas se encontraba la constructora brasileña Norberto Odebrecht S.A.

En el transcurso de la investigación, personas cercanas a Baldizón aceptaron su culpabilidad y enfrentan condenas. Además, se señaló que 108 diputados recibieron Q250 mil cada uno para aprobar un préstamo destinado a la construcción de obra pública. 

Sin embargo, Sinibaldi logró anular los acuerdos de colaboración eficaz y obtuvo su libertad tras estar recluido en Mariscal Zavala. Aunque había estado prófugo desde 2016, se entregó a la justicia en agosto de 2020.